BRICS Busca Consensos sin Confrontar a EE. UU en Cumbre de Río
POR: REDACCIÓN
Los BRICS se reúnen en Río de Janeiro este domingo 6 y lunes 7 de julio en un contexto marcado por la tensión en Oriente Medio y las políticas de Donald Trump, actual presidente de EE. UU., que han influido en el tono reservado del grupo. La cumbre se realiza sin la presencia de los mandatarios de China y Rusia, lo que podría limitar la posibilidad de una declaración contundente contra Washington.
El encuentro tiene lugar bajo fuertes medidas de seguridad en la ciudad de Río de Janeiro, donde se desplegarán más de 20 mil elementos de las fuerzas armadas. La fuerza aérea brasileña controlará el espacio aéreo con cazas equipados con misiles y cerrará temporalmente el aeropuerto Santos Dumont, como no ocurría desde los Juegos Olímpicos de 2016.
BRICS en Río de Janeiro: ausencias clave y tono moderado
El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva será anfitrión de la cumbre, que reúne a 11 países miembros, entre ellos Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, que en conjunto representan cerca del 40% del PIB global. Sin embargo, la reunión estará marcada por la ausencia del presidente Xi Jinping, quien no asistirá por primera vez desde 2012. En su lugar, participará el primer ministro Li Qiang. Tampoco asistirá el presidente ruso Vladimir Putin, sobre quien pesa una orden internacional de captura por crímenes de guerra; Moscú confirmó su posible participación virtual.
Según expertos consultados por la agencia AFP, el grupo evitará menciones directas a Estados Unidos en su declaración final. Las posturas de países como India, que mantiene vínculos comerciales con Washington, influyen en un enfoque cauteloso. En junio, tras un ataque de EE. UU. contra instalaciones iraníes, el bloque emitió una declaración considerada ambigua, reflejo de las divergencias internas.
Multilateralismo, clima e inteligencia artificial en agenda
Uno de los temas centrales será el impulso al multilateralismo. El gobierno brasileño busca establecer consensos sobre la reforma de la gobernanza global, en un contexto de creciente tensión internacional. También se abordarán asuntos como el cambio climático, en vista de que Brasil será sede de la COP30 en 2025, y la regulación de la inteligencia artificial.